viernes, 22 de marzo de 2013

Puro, claro y eterno.

El sentir: algo grandioso, magnífico, perfecto, simplemente inigualable. Dispuesto a hacer que de tu rostro salgan las más bellas sonrisas que pude haber visto en ti; así como las primeras que pude admirar al tiempo que yo te decía ciertas cosas que hicieron mi realidad cambiar, y espero que la tuya también. La singular belleza que acompaña tus deslumbrantes ojos, el peculiar aroma que me hace desfallecer día con día, la bonita risa que emerge de tu linda boca cuando en ella una curva espectacular se dibuja a lo largo de tu rostro; rostro que me hace suspirar y perder la cordura.

Efímera es todo aquello que no perdura, pero esa palabra en tu corazón no existe, porque ahí habita solamente un "Por siempre" el mismo que repites hasta el cansancio cuando estamos juntos, creando nuevos panoramas para explorarlos a lo largo de ésta vida, que esa sí es efímera. Aunque suene patético y un tanto adelantado, mi alma necesita expresar que no requiere de más materia para poder vivir, lo único que pide a gritos es quedarse el tiempo que se nos otorgue, junto a la tuya; para así, jamás volver a separarnos. Porque, en efecto; es importante enfatizar que mi teoría es verdad y todos los demás mitos que puedan existir en ésto que pinta para ser más que perfecto; nosotros ya sabíamos de nuestra existencia, sabíamos a la perfección de todo ésto, sabíamos que estábamos destinados a estar juntos, sabíamos que los dos necesitábamos el uno del otro, sabemos que entre ambos existe algo mejor que el amor. No tiene nombre porque no encontramos el adecuado que describa mejor ésta nueva emoción que hace estremecer todos mis sentidos.

Detengamos el tiempo, inventemos nuevos universos, hagamos que el mundo se vuelva en contra nuestra, mil cosas más por añadir a la lista que comienzo a hacer para el resto de nuestras vidas. Perdón por el anticipo y si suena un tanto atrevido pero es lo único que quiero y querré; quizá porque después de mucho tiempo de vagar sin rumbo fijo, mi mirada se clavó en la esencia que despides al balanceo de tus firmes pasos. O tal vez fue la forma hechizante que tuviste para enamorarme de la forma en que lo has hecho hasta ahora, porque confío que puede llegar a niveles gigantescos que quizá, no conocerían límite alguno.

Las palabras expiran, así como todo en éste mundo inadecuado para los dos, porque no necesitamos de otra cosa material para subsistir si a mi lado te encuentras. La naturaleza es nuestra única y fiel compañera que hará que el tiempo sea tardío mientras paseamos por el largo camino que espera ser recorrido y marcado por las huellas de nuestros pies, los que serán parteaguas en la formación de nuevas cosas que estamos por inventar.

Así será hasta que éste planeta decida que no formemos parte de él más, pero mientras eso sucede no te olvides de prestar tu mano y no soltar la mía aún así ocurran los hechos más violentos, las peores tempestades, los grandes conflictos. Porque si una vez te encontré hace mucho tiempo, y hoy que nos encontramos de nuevo para ser felices, no quiero perder eso que hace mucho extravié pero seguramente no recuerdo, tu amor.

Para ti, mi puro amor y corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario